sábado, abril 24, 2010

ABEJAS EN FLOR



No se olviden de que las TEOFANÍAS son las señales de Dios, a lo cual hace referencia la primera entrada que subí a este blog el 13 de Julio de 2006. Gracias a María Helena Castro por sus flores de PITAHAYA, cuyo ciclo de vida durará, como mucho, unas 4 o 5 horas.


"Cielo de cáscara de naranja, la sangre de las pitahayas goteaba entre las nubes, a veces coloreadas de rojo y a veces rubias como el pelo del maíz o el cuero de los pumas." Miguel Ángel Asturias - ´Leyendas de Guatemala' (1930)



"Un escuadrón de guerreros pasa. Pitahaya las caras, pitahaya las manos, pitahaya los pies. Todos van empenachados con plumas purpurinas. En las orejas, a manera de aretes, pájaros de plumas rojas, flores de fuego." Miguel Ángel Asturias.


En inglés la pitahaya recibe el magnífico nombre de "dragon fruit".


Amplíe todas las fotos con un click

"Allí íbase a oír el alma, dichosa y visible, la voz inteligente y musical, el foco de alegría de las horas hermosas del jardín. Allí iba a aprenderse, en la escuela de las abejas, las preocupaciones de la Naturaleza omnipotente, las luminosas relaciones de los tres reinos, la organización inagotable de la vida, la moral del trabajo ardiente y desinteresado y lo que es tan bueno como la moral del trabajo, las heroicas obreras enseñaban también a gustar el sabor algo confuso del descanso, subrogando, por decirlo así, con los rasgos de fuego de sus mil alitas, las delicias casi intangibles de aquellos días inmaculados que giran sobre sí mismos en los campos del espacio, sin traernos nada más que un globo transparente, vacío de recuerdos, como una felicidad demasiado pura." Mauricio Maeterlink - 'Vida de las Abejas' (1901)



"Pequeño pueblo tan resuelto y tan profundo, alimentado de calor y de luz, y de lo más puro que hay en la Naturaleza, el alma de las flores, es decir, la sonrisa más estridente de la materia, y su esfuerzo más conmovedor hacia la felicidad y la belleza..." Mauricio Maeterlink



"La abeja encuentra allí un baño inesperado, moja concienzudamente en el líquido sus bellas alas diáfanas, y, a pesar de sus inmensos esfuerzos, no logra emprender de nuevo su vuelo. Aquí la espera la astuta flor. Para salir de la taza mágica, no existe más que una sola abertura: la canal por donde se va el agua sobrante al depósito. Tiene apenas la anchura necesaria para el paso del insecto cuya espalda toca desde luego la superficie pegajosa del estigma, y después las glándulas viscosas de las masas de polen que la esperan a lo largo de la bóveda. Escapa así, cargada de polvo adhesivo; entra en una flor vecina, en que se repite el drama de la comida, de los empujones, de la caída, del baño y de la evasión, que pone por fuerza en contacto con el ávido estigma el polen importado. He aquí pues una flor que conoce y explota las pasiones de los insectos." Mauricio Maeterlink


Amplíe todas las fotos con un click

"He aquí pues una flor que conoce y explota las pasiones de los insectos." Mauricio Maeterlink







OJO AL EQUIPAJE Y AL OJO




En otro lugar de Popayán, esta araña se alista a disfrutar su lonchera